
Si me preguntás yo no sé donde estoy
si me muevo o si me duermo.
Ya no sé cuanto tiempo pasó
si se detuvo o siguió.
Sin mis ojos y sin la luz veo mejor
puedo contemplar todo
no necesito de mi imaginación
no me cuelgo en mi cabeza.
Estoy nadando en las sábanas
me lleva la marea
y aunque no sé a dónde voy, yo voy
no me importa llegar.
La piel, las uñas y unas caricias
desde ahora son palabras
la obsesión de mi cuello es tu pelo
tus suspiros de mi pecho.
Un abrazo que no basta con los brazos
un momento que es eterno.
Aunque no haya aire sigo respirando
en tu espalda o en mi almohada.
Poesía y arte por Kevin Cetto