
Los que habitamos este tramo queremos saber
cuánto falta
en el horizonte las naves
no son ni copos blancos
todavía
pero la espera es la quintaesencia
de nuestros nacimientos
los que flotamos esta danza sin oxígeno
merecemos saber
desde dónde viene
y es que nuestro mientras
es una desesperante pausa roja
y enquistada
en fotos viejas y el humo
que escupimos como sangre
bebiendo el cóctel de estos días:
tardes de honda respiración
miedos atávicos
vino con hielo
los amigos amontonados
en cocinas alquiladas
canciones que nos cantan
placeres de azúcar
hojas marcadas en libros con finales ya sabidos
muñecos de madera
cuadernos con corazones
piedras-ofrendas que siempre guardamos
esperando que llegue
el talismán
Poema por Jeremías Felioga
Foto por Paola Mansilla